Pioneros de Gredos.
Por Antonino Gónzalez Canalejo.
La montaña ha ejercido siempre gran influjo y atracción sobre el hombre. Unos se acercan a ella por deporte, por aventura y por disfrute de la naturaleza. Otros buscan, además, ampliar sus conocimientos.
A comienzos del siglo XX se desarrolla en Madrid la afición por el alpinismo. Se fundan grupos como el Club Alpino Español, CAE, que sigue una línea deportiva fundamentalmente, y la Sociedad Peñalara que trata de poner en práctica los postulados regeneracionistas de la Institución Libre de Enseñanza, ILE, respecto a la naturaleza, el paisaje y el excursionismo. Descubren la sierra de Guadarrama y después se lanzan a la conquista de las montañas próximas.
Llegan a Gredos donde influyen en una serie de colectivos locales que asumen sus prácticas y se crean sociedades deportivas en Hoyos del Espino, El Barco de Ávila y Arenas de San Pedro que se suman a la empresa de conocer la Sierra.
En esas sociedades incidirán también otros factores como la caza, el turismo o la mejora de las comunicaciones que terminarán por abrir el espacio serrano a los visitantes y harán de Gredos un destino codiciado.